El gigante coreano lanza un nuevo smartphone basado en el sistema operativo Android. El nuevo Samsung Galaxy S cuenta con una pantalla AMOLED de 4 pulgadas y una dotación tecnológica de primer nivel. El dispositivo incorpora un potente procesador a 1 GHz, hasta 16 Gbytes de memoria, completas opciones de conectividad y un receptor A-GPS integrado.
El Samsung Galaxy S llega como claro intento de posicionarse en la gama alta de smartphones basados en Android. El dispositivo destacará, en primer lugar, por su impresionante pantalla de cuatro pulgadas, multitáctil y con tecnología AMOLED. Ofrece una resolucón nativa de 800 x 480 píxeles, es especialmente resistente a molestos reflejos y hereda mDNIe, una solución técnica de la última serie de pantallas LED de la casa coreana que mejora la nitidez. El teléfono mide 62,4 x 122,4 x 9,9 milímetros con un peso de 118 gramos
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